Tillie Walden is a cartoonist
and illustrator born in 1996 from Austin, Tx. Her first book, The End of
Summer, came out from Avery Hill Publishing in July 2015. Tillie loves cats,
architecture, and going to bed at 8pm every night.
Si no supiéramos que Tillie
Walden no tiene 20 años cumplidos, nos faltarían elementos de juicio para
entender y acercarnos a I Love this Part. No porque su arte y narrativa
presenten algún tipo de inmadurez adolescente, que no es el caso, sino porque
su discurso es jovencísimo y a los que ya doblamos su edad nos enseña a
entender el salto generacional que se ha producido en las últimas décadas. Y es
que I Love this Part es un relato intimista, poético y honesto del amor en
estos tiempos de comunicación multitecnológica a jornada completa.
Como decimos, no parece que Walden acabe de empezar en esto. Su talento como dibujante y colorista demuestra una madurez sorprendente. Su estilo costumbrista y su dominio de la acuarela están cargados de profundidad lírica; y su imaginación como narradora depara, igualmente, momentos evocadores y elipsis reveladoras.
Como decimos, no parece que Walden acabe de empezar en esto. Su talento como dibujante y colorista demuestra una madurez sorprendente. Su estilo costumbrista y su dominio de la acuarela están cargados de profundidad lírica; y su imaginación como narradora depara, igualmente, momentos evocadores y elipsis reveladoras.
La niñez y adolescencia son
periodos de formación, descubrimiento y, muchas veces, desconcierto. A través
de los ojos del niño el mundo se ve enorme. Walden, sin embargo, opta por el enfoque
opuesto: en I Love this Part las dos niñas protagonistas, como sucede también
en la niñez, crean su propia realidad, ellas son las únicas protagonistas de su
propia historia, de sus confidencias y secretos, de sus charlas intrascendentes
sobre vídeojuegos y del modo en que estas conversaciones tejen poco a poco su
futuro... El entorno, el paisaje y la ciudad son sólo escenarios de ese gran
teatro que es hacerse mayor. Por eso, la opción gráfica de Walden de convertir
a sus dos protagonistas en gigantes que recorren sus escenarios vitales como si
no existiera nadie más en el mundo, está cargada de sentido y profundidad
metafórica. Sólo cuando empiezan a crecer, cuando descubren los sinsabores de
la vida y las relaciones, las niñas que están dejando de serlo se representan
con una talla normal en un mundo normal.
Además de todo esto, I Love this Part es una belleza visual. La expresividad de sus personajes y la majestuosidad de sus arquitecturas y paisajes (coloreados en un bitono violeta, primero, y gris, después) dejan adivinar el talento y la inteligencia de una autora de la que vamos a hablar mucho y bien. Atentos, editores.
Además de todo esto, I Love this Part es una belleza visual. La expresividad de sus personajes y la majestuosidad de sus arquitecturas y paisajes (coloreados en un bitono violeta, primero, y gris, después) dejan adivinar el talento y la inteligencia de una autora de la que vamos a hablar mucho y bien. Atentos, editores.