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viernes, octubre 27, 2023

La arquitectura de las viñetas is back

Este octubre de 2023 ha sido, sin duda, el mes más prolífico que hemos vivido nunca en el plano editorial. A la publicación de La normalización postmoderna (1989-2021), tenemos que sumar una noticia que nos llena de ilusión. Cuando nuestro amigo José Manuel Trabado nos sugirió reeditar La arquitectura de las viñetas dentro de la colección Grafikalismos que él coordina para el servicio de publicaciones de la Universidad de León, aceptamos sin pestañear. No se nos ocurre mayor honor que compartir catálogo con tanto nombre ilustre de la crítica comicográfica, ya saben los Antonio Altarriba, Yexus, Viviane Alary, Enrique del Rey o el mismo José Manuel Trabado.

La reedición, además, es espectacular y mejora a su antecesora con una detallada revisión de erratas y una lujosa impresión a color en papel de alto gramaje. Cuando llegó el volumen a nuestras manos casi se nos cae una lagrimita: ¡Espectacular!

Por eso, y a modo de reencuentro con una obra que ha sido muy importante en nuestro recorrido dentro de la crítica de cómics, no se nos ocurre mejor celebración que recuperar el prólogo que en su día le dedicó el maestro Román Gubern. Se lo dejamos aquí abajo:


EL NOVENO ARTE A LA LUZ DE LA NARRATOLOGÍA 

Lo primero que hay que agradecer a este libro de Rubén Varillas es su reivindicación de la llamada “literatura de kiosko”, una reivindicación cultural tardía entre nosotros, pero que hace casi un siglo ya habían efectuado Guillaume Apollinaire y los surrealistas franceses, fascinados por las aventuras de Fantomas, de Nick Carter y de Arsène Lupin, tanto como por los trepidantes seriales norteamericanos y franceses de aventuras que llegaban a las pantallas en las primeras décadas del pasado siglo. Percibieron, de modo pertinente, que las narraciones icónicas –que desde los años sesenta fueron englobadas en aquel país por Claude Moliterni en el ámbito de la “figuración narrativa” - proponían sueños libérrimos materializados sobre soportes físicos que se ofrecían a la contemplación y al placer del público. Y es esta oferta de imágenes, en su modalidad de tebeo o cómic, la que el autor ha elegido como corpus para su análisis narratológico. Es cierto que el autor de cómics, a diferencia del autor literario –cuyos textos constituyen el objeto de estudio privilegiado tradicionalmente por la narratología-, debe poseer dos habilidades distintas, las del dibujante y las del narrador, para satisfacer las exigencias de la mímesis (de las apariencias visibles) y de la diégesis (del flujo del relato). Aventurándose en un territorio poco explorado, y armado de los saberes de la tradición narratológica (Genette, Greimas, Propp, Barthes, Chatman), el autor se enfrenta a la morfología específica del cómic, en su condición de estructura secuencial de imágenes fijas consecutivas y discontinuas, para representar, a veces con apoyo de textos lingüísticos, una acción narrativa según un vector cronológico. 

Llevando a cabo un meticuloso despiece de este medio de expresión desde el punto de vista narratológico, el autor cataloga y describe una sistematización de procedimientos formales utilizados por los creadores para construir el “efecto narración”. Y esto le lleva a un análisis pertinente de los personajes, del espacio narrativo, de las acciones, del punto de vista, etc.

Hace años Marshall McLuhan explicó con elocuencia la atracción que algunos artistas de vanguardia sintieron hacia los cómics, señalando que “Picasso ha sido por mucho tiempo aficionado a los cómics americanos. La cultura highbrow, de Joyce a Picasso, ha admirado desde hace tiempo el arte popular norteamericano porque encuentra en él una reacción auténticamente imaginativa a la cultura oficial”. No sólo Picasso admiró los cómics, sino que cultivó también tempranamente esta modalidad expresiva, como cuando dibujó seis viñetas para describir su viaje a París en compañía de Sebastià Sunyer en abril de 1904 , por no mencionar su narración seriada de Sueño y mentira de Franco (enero-junio de 1937), que precedió a su Guernica. Y lo mismo hizo el pintor expresionista germano-americano Lyonel Feininger, autor desde 1906 de dos magníficas series para el periódico The Chicago Tribune: The Kin-der-Kids y Wee Willie Winkie´s. Esta fructífera ósmosis o interacción entre la cultura highbrow y la masscult tuvo un esplendoroso despliegue didáctico en la soberbia exposición que exhibió el Museo de Arte Moderno de Nueva York (de octubre de 1990 a enero de 1991), con el sugestivo título High & Low. Modern Art, Popular Culture

Dicho esto, hay que añadir que la calidad o la excelencia estética de un cómic tiene poco que ver con su respeto a las prescripciones del canon, pues existen tanto obras maestras “clásicas” (o tradicionales, como el Flash Gordon de Alex Raymond), como obras maestras “innovadoras” (o vanguardistas). En este segundo apartado descolló muy tempranamente Winsor McCay, primer autor que exploró, con una imaginación y un atrevimiento prodigiosos, las convenciones formales del medio. Gracias a McCay, que cultivó este género desde 1903, la experimentación vanguardista en este medio periodístico y masivo precedió a la que se expandió luego en la pintura (desde el cubismo, en 1907), en la escultura, en la fotografía y en el cine. Esta línea experimental se prolongaría gracias a artistas como George Herriman, Guido Crepax, Guy Pellaert o Jean Giraud. De modo que si es cierto que han existido cómics inventivos y cómics rutinarios, o cómics innovadores y cómics canónicos, han sido los segundos los que han proporcionado al mundo académico el corpus normativo para la mayor parte de estudios sistemáticos acerca de su lenguaje y sus convenciones. 

Este libro no sólo reivindica la usualmente desatendida “literatura de kiosko”, sino que presta atención, y recupera con toda justicia, la demasiado olvidada producción española anterior a la Guerra Civil, con figuras tan brillantes y atrevidas como K-Hito (Ricardo García López), que en no pocas ocasiones bordeó la “poética del absurdo”, como en la serie protagonizada por su estrafalario Macaco. Se trata de un justo y sano ejercicio de recuperación de nuestra memoria histórica en este terreno estético, que tan frecuentemente se margina y orilla en el descampado de las subculturas. Como no podía ser de otro modo, abundan en este libro las observaciones acerca de las convergencias entre los cómics y la expresión cinematográfica, su pariente más próxima en la cultura icónica de masas, al punto de que a veces los cómics han sido calificados, de modo harto injusto, como “cine para pobres”. Algunos álbumes de cómics han desmentido con su lujoso look y su precio tal condición indigente. Y, claro está, el parentesco entre cómics y cine se extiende, no sólo al campo de las convenciones formales y narrativas, sino a sus trasvases arquetípicos y mitológicos y que hoy habría que prolongar todavía hacia el territorio de los videojuegos, nuevos y prósperos agentes en el abigarrado diálogo de la intermedialidad audiovisual contemporánea. A partir de ahora, esta documentada y pertinente incursión de Rubén Varillas en el análisis narratológico del universo del llamado Noveno Arte –de su anatomía y de su fisiología, podría decirse- se ha convertido en un trabajo de referencia insoslayable para los estudiosos de este medio

lunes, enero 13, 2014

La teoría del cómic: La novela gráfica. Poéticas y modelos narrativos.

Siempre hemos creído que la normalización del cómic sólo sería posible cuando el medio suscitara la misma atención, en todos sus ámbitos, que cualquier otro discurso artístico o narrativo. Eso significa que la salud del cómic dependerá de una atención social considerable y una difusión amplia en los medios y entre los lectores, al margen de su edad o condición, pero también, que el cómic debería ser un objeto de estudio y análisis en ámbitos académicos y científicos.
Hemos leído en alguna ocasión críticas a La arquitectura de las viñetas basadas en su complejidad terminológica y una densidad teórica que hacen de ella una lectura difícil para el aficionado medio o para el curioso. Aceptamos la crítica y estamos de acuerdo con la apreciación, básicamente porque nuestro estudio no nació como un proyecto divulgativo o de iniciación a la lectura, sino imbricado en su naturaleza académica y en el hecho de que se trata de una reescritura y reelaboración parcial de una tesis doctoral. Un lector sugería, en cierta ocasión, que este tipo de textos no deberían ver la luz, salir de su ámbito académico, que el lector no necesitaba complicarse la vida con tecnicismos lingüísticos o erudiciones academicistas que, de un modo técnico, sólo explicaban lo que él intuitivamente ya sospechaba o aceptaba con naturalidad. En este  punto ya nos es imposible comulgar con la lectura crítica de nuestro trabajo, por dos razones: el sentido último de la ciencia es, de hecho, comprender y explicar unos hechos naturales "mediante la observación y el razonamiento, sistemáticamente estructurados [deduciendo de ellos] principios y leyes generales" (RAE); no nos hace falta entender en detalle el funcionamiento del aparato digestivo para disfrutar de una buena ración de jamón ibérico, del mismo modo que no tenemos que adentrarnos en los mecanismos narrativos que estructuran ese discurso gráfico secuencial que denominamos cómic, para disfrutar de la lectura de Robert Crumb, desde luego. Esta premisa, sin embargo, no inhabilita la necesidad de que el cómic reciba atención académica y universitaria (como así está sucediendo en los últimos años) si queremos que su estatus dentro de la cultura contemporánea sea el mismo que el de otros vehículos narrativos (como el cine o la novela) o artísticos (pintura, ilustración...), que señalábamos más arriba. No tiene ningún sentido ser un nostálgico del cómic popular de entretenimiento, del tebeo nacido como medio de masas sin ínfulas de alta cultura, sencillamente porque ese nicho sigue y seguirá existiendo sin perjuicio de ese otro cómic que últimamente llamamos "novela gráfica".
Tan larga digresión viene a cuento de la reciente publicación de una de esas obras académicas que nos ayudarán a entender, desde un punto de vista científico y riguroso, los mecanismos internos del relato comicográfico, las repercusiones sociales y culturales de su reciente eclosión, así como algunas de las muy vivas controversias que se han despertado a su alrededor en los últimos tiempos. La obra, coordinada por un amigo de este blog como José Manuel Trabado Cabado, se llama La novela gráfica. Poeticas y modelos narrativos, y traduce y recoge algunos de los textos recientes más importantes que se han escrito arededor del fenómeno de la novela gráfica; entre ellos "La cultura del comic book frente a la novela gráfica", de Eddie Campbell (una entrevista en la que el autor explica su archiconocido manifiesto), o su reverso a cargo de Manuel Barrero, "La novela gráfica: perversión genérica de una novela editorial" (que tantas vueltas y reacciones ha suscitado en la red).
Pero, además, la colección de textos incluye estudios de autores tan reputados como Roger Sabin, Pascal Lefèvre, Jan Baetens, Robert C. Harvey, Gene Kannenberg, Bart Beaty (cuyo texto sobre los cómics autobiográficos hemos tenido el honor de traducir) o del mismo José Manuel Trabado que contribuye al debate con su muy esclarecedor "La novela gráfica en el laberinto de los formatos del cómic". El índice completo de artículos es el siguiente:

INTRODUCCIÓN

JOSÉ MANUEL TRABADO CABADO: La novela gráfica en el laberin­to de los formatos del cómic........................................11

LA NOVELA GRÁFICA EN SU CONTEXTO

ROGER SABIN: La novela gráfica en su contexto.....................65

PASCAL LEFÈVRE: La importancia de ser publicado..................83
CHARLES HATFIELD: Comix, tiendas de cómics y el auge de los cómics alternativos despuésde 1968......................................103
JAN BAETENS: Novelas gráficas:¿literaturas sin texto?...............169

TEXTOS PARA UNA POLÉMICA
MANUEL BARRERO: La novela gráfica: perversión genérica de una etiqueta editorial...................................................191
ÁNGEL DE LA CALLE: A propósito de la novela gráfica..............225 
EDDIE CAMPBELL: La Cultura del comic book frente a la cultura de la novela gráfica.................................................231 
 
NOVELA GRÁFICA Y AUTOBIOGRAFÍA 
BART BEATY:La autenticidad de la autobiografía...................243
ROCÍO G. DAVIS: El cómic y las autobiografías de la niñez. Leer a Marjane Satrapi y LyndaBarry..................................287

EN EL CENTRO DEL CANON: LENGUAJE Y ARQUITECTURA NARRATIVA DE LA NOVELA GRÁFICA
ROBERT C. HARVEY: La senda de los héroes hacia el arte...........317
ERIN MCGLOTHLIN: Ningún tiempo mejor que el presente. Narración y tiempo en Maus, de Art Spiegelman............................339
GENE KANNENBERG, JR.: Los cómics de Chris Ware: el texto, la ima­gen y las estrategias narrativo­ visuales...........................375
ANNALISA DI LIDDO: Consideraciones formales sobre la obra de Alan Moore..........................................................409
 

¿Para todos los públicos? Quizás no, pero se nos ocurren muchas personas que, seguro, disfrutarán de esta colección de ensayos tanto como de la lectura de las obras que los han inspirado. Hay tiempo y lugar para todo. Una cuestión de normalidad.

jueves, diciembre 10, 2009

Nos vemos en Expocómic.

A ver, que se acaba la semana y al final se nos va a pasar la cosa de la promoción y el encuentro comiquero. Nos confirman en la editorial que este sábado 12 de diciembre, a eso de las 18:00, habremos de permanecer un ratito sentados en el stand bizantino de Expocómic 2009, saludando, charlando y dedicando Arquitecturas de las viñetas a aquellos de ustedes que tengan a bien hacernos una visita.
Además, lo haremos junto a buenos amigos, que las esperas si son en buena compañía siempre son más gratas. El cuadrante de firmas que nos han enviado se ve así:
Compartiendo stand con Aleta Ediciones, el horario de firmas de Viaje a Bizancio Ediciones para Expocómic 2009 es el siguiente:
- Jordi Bayarri estará firmando todos los días del evento por la mañana y por la tarde y presentamos su nueva novedad de Entre Tinieblas Nº 06: Mi Esposa, Mi Vampiro.
- Gaspar Naranjo firmará a las 18:00 horas del sábado día 12 de diciembre su cómic De cómo te conocí, te amé y te odié. No te pierdas sus acuarelas descacharrantes, dulces y delicadas.
- Rubén Varillas firmará a las 18:00 horas del sábado día 12 de diciembre su libro sobre la narratividad y teoría del cómic La Arquitectura de las Viñetas. Si quieres una dedicatoria y un dibujo de Gaspar Naranjo (la portada del libro es suya), y charlar un poco con él de temas humanos y suprahumanos, allí estará él.
Lo dicho, si ustedes quieren, nos vemos por los madriles. Llevaremos un clavel en la solapa para hacernos reconocibles entre tanta estrella de las viñetas. Prometemos fotos e impresiones a la vuelta.

miércoles, agosto 26, 2009

Firmas feriales y dedicatorias castellanas.

Por cierto, antes de seguir con Dash Shaw, que no se nos olvide: este sábado 29 de agosto estaremos en la Feria del Libro de Palencia (dentro de las festividades de San Antolín), saludando a amigos y firmando ejemplares de La arquitectura de las viñetas. El encuentro tendrá lugar en el stand de la Librería Alfar, entre las 19:30 y las 21:30. Junto a nosotros estará también firmando y haciendo dibujitos dedicados un artista de los de verdad, el bueno de Pejac ilustrando su Vuelo rasante. Si les apetece o les viene bien, en Palencia nos vemos.

lunes, mayo 11, 2009

La arquitectura de las viñetas.

Notarán que en las últimas fechas el ritmo de actualizaciones de este blog deja mucho que desear. Como para casi todo, existe una explicación. 
Hace ya mucho de aquel post, en el que anunciábamos la conclusión de una aventura académica. Desde aquel día, hemos estado intentando que aquel proyecto pudiera ver su versión impresa. Dos años es tiempo, pero al fin, después de tanteos varios, Viaje a Bizancio, la casa de ese editor entusiasta, visceral y utópico que es Yorkshire, decidió embarcarse con nosotros en un viaje que se presumía turbulento. Ayer a altas horas de la mañana, después de varios días (semanas), remando contracorriente y salvando escollos, llegamos a puerto fatigados y somnolientos, felices. Gracias a ésto:
La arquitectura de las viñetas. Texto y discurso en el cómic es un trabajo de investigación de muchos años en el que simplemente (nada menos) hemos intentado acercar el cómic a los mecanismos de análisis narratológico que, desde hace décadas, llevan aplicándose sobre otros discursos afines, como el cine o la novela. No ha sido hasta fechas muy recientes cuando a los tebeos se les ha empezado a conceder cierto crédito académico (a finales de los 90, algunos nos miraban raro cuando les contábamos los pormenores del proyecto). Pues bien, la cosa no sólo ha sido factible sino que, además, nos ha posibilitado acercamientos científicos a autores y viñetas de un modo y en una profundidad que en un principio no nos habíamos siquiera planteado. En el fondo, todo fue siempre una bella excusa para seguir descubriendo, comprando, leyendo y releyendo tebeos.
Creemos que el esfuerzo ha merecido la pena. Intenciones, hemos puesto en él las mejores. Ahora se lo dejamos a ustedes, así calentito, con sus pastas negras y amarillas, para que, si les apetece, le echen un vistazo y nos cuenten que les parece (la presentación oficial será en el Salón del Cómic de Barcelona de este año). A algunos les parecerá un tostón académico, otros descubrirán que hasta detrás de las viñetas y páginas en apariencia más triviales hay toda una estructura de signos, codificaciones y mecanismos cohesivos complejos; algunos reconocerán imágenes, recordarán tebeos y se compartirán algunas de las apreciaciones técnicas, como críticos que somos todos, a fin de cuentas, de nuestras propias lecturas.
Y al que no le convenzan estas aventuras narratológicas, discursivas, pragmáticas o semióticas, siempre puede recrearse en el breve y magnífico prólogo que nos ha regalado el maestro Román Gubern (mil gracias) o en las brillantes, vivas y siempre magnéticas ilustraciones de Gaspar Naranjo para la portada y las solapas (otras mil para usted, don Gaspar). Gracias encarecidas por su fe incondicional a Bizancio Ediciones y gracias, desde luego, a todos los dibujantes y guionistas de cómics que, siempre, nos han hecho la vida un poco más interesante. Seguimos por aquí.