Nos ha llegado el informe anual de la ACT (Asociación Cultural Tebeosfera) con su análisis sobre "La industria del cómic en España en 2016". Se trata, una vez más, de un análisis riguroso y preciso, refrendado por números, porcentajes y datos concretos. Una labor encomiable de investigación y confrontación estadística que nos ofrece datos y números indiscutibes sobre el mercado del cómic en nuestro país; una información, por cierto, que hasta hace no mucho estaba envuelta en un secretismo y una falta de transparencia incompresibles.
Hay que agradecer y aplaudir a la Asociación Tebeosfera por su trabajo continuado en la defensa del cómic y por su esfuerzo denodado por construir una base de datos (un gran catálogo enciclopédico, más bien) que lleva años prestando una ayuda incalculable a todos cuantos nos dedicamos a la investigación comicográfica. Pero, además, con iniciativas como la publicación de estos informes anuales o la aparición regular de su revista teórica online ("Revista teórica periódica fundada en 2001 que estudia los medios
vinculados a la cultura popular gráfica, tales como la historieta y el
humor gráfico, la ilustración, la novela popular, el cine o los juegos"), Tebeosfera está creando la base para uno de los trabajos de investigación sobre el cómic más serios y rigurosos de Occidente.
No nos une a la
ACT más que el afecto a sus miembros, el respeto por su trabajo, alguna colaboración esporádica y el
hecho de ser socios de su proyecto desde hace años. Por esa dedicación, merecen toda nuestra admiración. Y, por ello, desde aquí invitamos a investigadores y amantes del cómic en general a que colaboren y/o se asocien a la ACT. Sólo el envío regular de sus inmaculadas publicaciones impresas ya haría que esto último mereciera la pena.
Al respecto, no tenemos más espinita clavada que la falta de comunicación (o aprecio) que se percibe entre las diferentes Asociaciones de Investigadores de Cómic que podemos encontrar en nuestro país. Es una verdadera lástima que, en un momento en que el acercamiento científico y académico al cómic en España parace haberse consolidado (como demuestra el impresionante Congreso Internacional de Estudios Interdisciplinares sobre Cómic que se está celebrando en Zaragoza), no seamos capaces, unos y otros, de ponernos de acuerdo y llegar a consensos desinteresados y constructivos. Ante la falta de apoyo institucional ese es el camino que nos queda por construir.
UNA INDUSTRIA ESTABLE DEL CÓMIC, CON MÁS SUPERHÉROES Y MANGA
Como
cada año, la Asociación Cultural Tebeosfera emite su informe anual sobre la industria del cómic en España trabajando sobre la base de datos
más rigurosa de historieta y sátira gráfica en español. Los
datos de este año revelan un leve descenso de la producción global, con
un muy pequeño aumento de la producción de tebeos genuinos y una
pérdida, en proporción, de la obra de autoría netamente española. Solo
son tebeos "pata negra", producidos aquí con obra de autores nacionales,
un 10,65% de los lanzamientos de 2016, que en total ascendieron a 2.867
títulos diferentes. Desconocemos las tiradas, pero entre los tebeos más
vendidos estuvieron las traducciones de The Walking Dead, el manga One
Punch-Man y entre lo nacional: El ala rota, el integral de 13 Rue del
Percebe y la crónica dibujada La guerra civil española, que sobrepasa ya
los 12.000 ejemplares vendidos.
En España lo que más se
distribuye es cómic traducido (casi un 75% lo son), con periodicidad
mensual en su mayoría, generalmente con formato de libro (solo uno de
cada cuatro tebeos se sirve grapado) y con unas dimensiones estándar
parecidas a las del comic book estadounidense. No obstante, el auge del
manga es cada vez mayor, puesto que las traducciones de cómic japonés
crecen de año en año y esto implica una mayor abundancia de los libros
de pequeño formato.
El incremento más patente en 2016 ha sido el
de traducciones de cómic estadounidense, acaso propiciadas por la
presencia constante de superhéroes en series y películas, lo cual va en
consonancia con el descenso de las traducciones de cómic europeo.
Nuestros autores publican menos aquí y más en el extranjero, sobre todo
para los sellos Marvel y DC. Las mujeres, en su conjunto, siguen
participando poco en esta industria, incluso si sumamos lo que producen y
editan en España con las obras que desarrollan para el exterior: un 3%
respecto del total.
Los tebeos que más se leen actualmente son de
aventuras, muchos de superhéroes, y bastantes son de fantasía heroica y
futurista (género de muchos mangas). El tebeo dramático, el romántico y
el humorístico van a la par pero ha descendido de manera preocupante el
cómic dirigido a la infancia, cada vez menos representado en nuestras
publicaciones. Panini, el sello que traduce los cómics de Marvel, es el
que mayor cantidad de títulos lanzó en 2016, más de quinientos. Norma
fue el sello que más variedad ofreció en su catálogo, pese a que no
superó las 320 novedades. Milky Way, un pequeño sello asturiano que
traduce manga, fue el que más creció comparativamente. Los editores más
procupados por lanzar tebeos autóctonos y en español fueron: Amaniaco,
Astiberri, B, Cornoque, Diábolo, GP, El Jueves y Nowevolution.
Las
cifras de nuestra industria se mantienen estables sobre la base de la
traducción pero también de la recopilación y reedición de obras de
probada calidad, que han proliferado en 2016 tanto o más que el cómic
comprometido, el experimental y el que surge de la autogestión
editorial.