En esta bitácora hablamos con frecuencia de cine de animación y anime, pero pocas veces nos hemos acercado a ese territorio borroso que algunos denominan arte digital. Puede ser que esa sea la mejor etiqueta para definir a un autor como Henning M. Lederer, en cuya obra tienen cabida gifs hipnóticos, trabajos de diseño gráfico, arte visual y obras de animación más convencionales.
Su vídeo para el tema "Anatomic", del compositor de música ambient Max Cooper, es una buena piedra de toque para entender su trabajo: en él, Lederer recurre a un diseño minimalista infográfico dibujado a mano para crear un efecto de zoom narrativo que se convierte en un viaje desde el cuerpo del ser humano hasta su estructura celular, transformando nuestro organismo en los engranajes de una máquina perfecta.
Sus gifs son aún más elementales, pero nos tienen deslumbrados. No podemos apartar los ojos de la pantalla cada vez que saltan las animaciones de su serie Covers, en la que Lederer anima las portadas geométricas de antiguos libros en un ejercicio de una (sólo aparente) sencillez desarmante. El resultado acerca el trabajo del artista alemán a una revisión postmoderna y digital del op-art más clásico. Similar en intenciones es su trabajo Geometry, en el que trabaja directamente sobre la base de motivos geométricos, que anima sobre el fondo de una melodía electrónica.
Tienen casi todas las animaciones del aleman un aire antiguo, apuestan por la nostalgia de los collages animados, los autómatas mecánicos y los engranajes de relojero (véanse The Sea of Time o Metropol). En otras ocasiones, el autor trabaja directamente sobre trabajos ajenos, como en Bicycle (sobre una ilustración de Mel Furukawa), Watch (versión animada de una pintura de Gerald Murphy) o Gears in Motion (que adapta un dibujo de Eric Drooker). Hasta en sus trabajos más tradicionales, se percibe en Lederer esa mirada nostálgica que comentamos, en ocasiones rememorando la animación surgida en los países del este durante el periodo comunista: obras como Little Fable o Moloch beben del collage, del sentido expresionista de la luz y de una sugerente atmósfera kafkiana.
En su blog machinatorium, el propio Lederer se acerca al panorama contemporáneo del arte digital y nos descubre las propuestas y trabajos de otros creadores coetáneos igualmente valiosos; una ventana abierta a un panorama artístico que no necesita de muros y museos para crear presente y abrir nuevas vías de expresión.
No se queden aquí, busquen y rebusquen entre los trabajos de Lederer, que nunca es tarde para la inocua lisergia visual.